jueves, 14 de enero de 2010

Preocupa demora en demoler construcción antigua del “Belén”

Podría llover y ocurrir un nuevo derrumbe

La demora en el inicio de los trabajos de demolición del área antigua del colegio Belén (I.E. Hermanos Blanco), afectada por un derrumbe ocurrido a comienzos de mes, preocupa a las autoridades ediles, a la directora del plantel y vecinos del lugar, ya que en cualquier momento podría volver a ocurrir un nuevo desplome.
Al respecto, el gerente general de la Municipalidad Provincial de Trujillo, Manuel Llempén Coronel, recordó que luego de producirse la caída de los muros de cinco aulas de este antiguo y céntrico colegio, la Municipalidad retiró los escombros y limpió parte colindante del área afectada, quedando a la espera de que el Instituto Nacional de Cultura (INC) determinara las acciones a seguir.
Tras autorizarse la demolición de la construcción antigua del colegio, en una reunión de trabajo de autoridades y funcionarios de Defensa Civil, se acordó que Defensa Civil Regional se haría cargo de la demolición y que la Municipalidad de Trujillo apoyaría tal acción con la maquinaria pesada necesaria. La demolición debía comenzar el pasado miércoles.
Llempén estuvo en el colegio el pasado miércoles para poner a disposición la maquinaria necesaria. Allí fue informado por Ricardo Lazo Suji, del Comité Regional de Defensa Civil, que aún faltaba terminar algunos detalles del plan operativo de demolición.
“El fin supremo de los objetivos de esta gestión municipal, liderada por César Acuña, es garantizar el respeto a la vida humana, por eso, la demora nos preocupa”, dijo el funcionario edil.
Recordó que el año pasado, con solo tres días de inusitadas lluvias, Trujillo tuvo grandes problemas, especialmente en las viviendas de la periferia y zonas marginales. “Ojalá que no vaya a llover antes de que se demuela la parte antigua”, puntualizó, agregando que ha recibido llamadas de la directora del colegio manifestando similar inquietud.
Finalmente, exhortó a que el INC La Libertad plantee ante Lima la modificación de algunas de sus normas relacionadas a la preservación y mantenimiento de las casonas coloniales que hay en el centro histórico de Trujillo, ya que las actuales normas impiden hacer mejoras.
De la manera en que están planteadas actualmente es muy costoso hacer mejoras en la estructura de las construcciones. Debe evaluase la situación real y los riesgos que implican estas casonas, para plantear la modificaciones necesarias, agregó.